Preguntas frecuentes sobre la PEP

La PEP es para cualquier persona que crea que puede haber estado expuesta al VIH. Algunas de las razones más comunes para necesitar medicación PEP son:
• Haber practicado sexo anal sin preservativo
• El preservativo se rompió o se salió durante las relaciones sexuales con alguien que tiene o puede tener el VIH
• Se compartieron agujas o jeringuillas con una persona que tiene o puede tener el VIH

Hable con un médico en nuestro Centro de Atención Integral, o en un consultorio de atención primaria, un centro de atención urgente, una clínica de salud sexual o una sala de urgencias. Es de suma importancia hacerlo lo antes posible tras la exposición.

Antes de prescribir la PEP, el médico le hará preguntas sobre su posible exposición, y también deberá hacerle una prueba rápida del VIH, ya que el plan de tratamiento será diferente si ya es seropositivo/a.

La mayoría de los seguros y Medicaid cubren la PEP.

Si no tiene seguro, los Programas de Asistencia al Paciente del fabricante del medicamento pueden ofrecer medicamentos de bajo costo o gratuitos a las personas que cumplan los requisitos.

Sí, algunas personas pueden experimentar efectos secundarios como diarrea, náuseas, dolor de cabeza, fatiga y malestar estomacal. Hable con su médico sobre cualquier efecto secundario grave o persistente.

Sí, puede seguir tomando la PEP si está embarazada. Sin embargo, debe interrumpir la lactancia durante los tres meses posteriores a la exposición. Hable con su médico sobre la posibilidad de tomar la PEP durante el embarazo o la lactancia.